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lunes, 3 de septiembre de 2012

CARTA DE AGRADECIMIENTO DEL MISIONERO D. FRANCISCO VÁZQUEZ

Estimado hermano:
 
En el pasado Agosto contamos con la presencia del Misionero Salesiano en Benín, D. Francisco Vázquez Adorna, que por muchos años fue Director de esta Casa Salesiana. Junto a toda la Familia Salesiana, participamos en una Eucaristía y posterior velada, cuyo fin era recaudar fondos para los jóvenes africanos, así como la fidelización de socios padrinos de los mismos. Adjuntamos Inscripción, para aquella persona que lo desee, hacerse socio.

Una vez de vuelta a África, D. Francisco nos escribe lo siguiente:
 
Queridos amigos todos:

Un año más, tras mi estancia de vacaciones en España, me siento obligado a escribir esta comunicación para agradeceros a todos vuestra acogida, vuestra sintonía con el trabajo que llevamos a cabo  aquí en Cotonú,  vuestra solidaridad y generosidad. Fui  en esos días portador del agradecimiento de nuestros chavales, comenté sus historias, problemas y necesidades y ahora os hago llegar su afecto y agradecimiento. Algunos pudieron hablar por teléfono con algunos de vosotros y solamente sabían decir: merci, merci, muchas gracias.

A mi retorno he encontrado, como de costumbre en estos lugares, situaciones que hacen pensar y que estimulan nuestra dedicación y entrega. Los problemas más preocupantes son todos los relacionados con el tema sanitario. Ahí nos perdemos; muchas veces no sabemos qué hacer y sobre todo como atenderlos. Cierto que no estamos llamados a solucionar los inmensos problemas que tiene Africa, pero cuando se trata de la salud y a veces de la vida de las personas no nos está permitido permanecer indiferentes. Tenemos ahora una operación de hernia muy avanzada ante la cual hay que ayudar o dejar que vaya a peores. Una hija de la mamá de Simba grave en el hospital y ellos apenas tienen para comer, mucho menos para atención médica

Hemos tenido situaciones muy alarmantes por causa de radiografías no bien hechas y diagnósticos que llevaban al quirófano en operaciones muy delicadas. El consejo y asesoramiento de nuestro médico de Cádiz, Fernando Carmona,  solicitó y pidió una ecografía de corazón, de ventrículo y aurícula antes de seguir esos caminos tan arriesgados. Lograda una atención, al parecer adecuada, se repitieron radiografías, electros y muchas pruebas más que nos van dejando poco a poco  sin recursos. La ecografía y el camino que se ha tomado en estos días que llevo aquí,  ha mostrado que nada de quirófano, por ahora y que los problemas son otros. Todavía aguardamos el diagnóstico final. Yo le decía al chaval en cuestión, que la raíz de sus problemas está en vivir, desde que vino de la aldea con 12 años, bajo un sombrajo con lluvia por encima y barro por debajo, sin comer muchos días, comiendo otras una vez al día y la acumulación de enfermedades de muchos años que no han tenido atención ni medicamento alguno y se han ido acumulando.

Son botones de muestra, hechos del día a día, vidas que se nos ponen por delante, y ante ellos yo me siento acompañado y respaldado por todos y cada uno de vosotros. Sigamos unidos, preocupados por hacer lo que esté a nuestro alcance con la alegría de compartir con aquellos que menos tienen, con los mismos sentimientos de Teresa de Calcuta ante la inmensidad de los problemas de la India y criticada por su labor a favor de los más pobres. Ella decía: yo no podré atender ni solucionar los problemas de la India, pero sí puedo y debo dar respuesta a las personas que Dios nos pone por delante y a sus problemas.

Estamos en vísperas de comenzar el curso. Preocupados ya por la contribución que deben comenzar a pagar. Hay un buen grupo de alumnos cuyos padres y familias dicen no poder seguir pagando estudios, otros que llegan a lo que llegan, y yo muy preocupado de que por falta de medios tengan que suspender estudios quienes abandonando su aldea se lanzaron a la aventura de irse a la gran ciudad para poder ser buenos profesionales y tener una preparación técnica. No basta el tema comida y demás, darle pescado para comer el día a día, aunque sea a veces lo más urgente. Creo que lo principal es facilitarles la caña o instrumento para que ellos mismos puedan pescar. Así lo entendió don Bosco: facilitar y hacer posible la formación y educación de los jóvenes, sobre todo los más pobres y abandonados, para que puedan ganarse honradamente el pan de cada día.

Queridos amigos, no quiero cansaros más. Lamento profundamente no poder haber saludado a todos. Entiendo que las fechas de mi estancia por esas tierras no son las más adecuadas. Sigo insistiendo en el mensaje que intenté transmitir: necesitamos la ayuda de muchos, de amigos, conocidos y personas sensibles a estos problemas del llamado Tercer Mundo. Ruego y pido cada uno se haga el compromiso de lograr al menos dos suscripciones de socios o colaboradores que garanticen una ayuda periódica para no dejar a nadie tirado en la cuneta de su vida por nuestra falta de generosidad o sensibilidad, miopía, comodidad o posible egoísmo. Facilito con este mensaje el Boletín de inscripción para hacerlo llegar a cuantos podáis. Caso de duda acudid a Raúl de Cádiz.

       Cierto que ahí hay crisis y problemas, pero aquí es la subsistencia y el futuro de muchos chavales lo que está en juego. No nos instalemos en lo que hemos hecho, hay que hacer más, mucho más, porque son más los problemas que hay que atajar. En estos días estamos en el tema de alquilar una casa que pueda alojar unos seis chavales de los que han perdido padre y madre o que no tienen nadie aquí y vagan de un lado a otro sin techo ni personas que les atienden. En la actualidad son cuatro los alquileres a nivel familiar que hay que pagar todos los meses. Ojalá podamos entre todos llegar a más.  

Sin angustia, con ilusión, optimismo y la alegría que nos da el vivir el mensaje del amor de Jesucristo el Señor, hemos de movernos, comprometer a otros,  ser creativos, reflexionar y ver iniciativas que aseguren la atención y cuidado de estos nuestros hijos, vuestros hijos.

Con la certeza de nuestro agradecimiento y oración, por mi parte y por la de ellos, os  deseo a todos todo tipo de bien y felicidad, para vosotros y todos vuestros seres queridos. Que Don Bosco, nuestro Padre y Maestro, nos siga alentando y ayudando en la atención, promoción y educación de los jóvenes, sobre todo los más pobres.

Siempre a disposición

PACO VAZQUEZ. SALESIANO